Os puede parecer pretencioso por mi parte querer hablaros sobre una cosa aparentemente tan simple como es el hecho de montar a caballo. No obstante, digamos que he visto jinetes tener comportamientos cuando menos inoportunos: tirando fuerte de la boca, o rompiéndole el dorso a sus caballos, hasta el punto de hacerle caer o casi… Por suerte, la mayor parte de la gente tiene cuidado, de cualquier forma algunos consejos pueden ser de utilidad.

Flexión lateral

Para este fin, empiezo por flexionar el cuello y la cabeza. Tira suavemente de la rienda y espera que tu caballo ceda a la presión flexionando ligeramente su cabeza hacia tu dirección. Luego, relaja completamente la rienda y acarícialo. Repite la operación pidiendo un poco más cada vez, hasta que tu caballo flexione con elasticidad y ligereza. La flexión ideal comporta tres parámetros: la nuca se encuentra encima de la cruz, la cabeza posicionada a 90º y las orejas paralelas al suelo.

• asegúrate que tu caballo está bien instalado sobre sus cuatro miembros;
• apóyate sobre tu pierna izquierda más que tirar de tus brazos;
• levanta bien la pierna derecha en el momento de pasarla encima de su grupa para no golpearle al pasar;
• aterriza suavemente sobre la silla, deberías posarte tan ligero como una pluma.

Y no lo olvides: si todo ha estado bien, ¡acaricia tu caballo!

Flexión

Algunos caballos tienen la reputación de tener problemas, ya que se ponen en marcha desde el momento que el jinete está sobre la silla. En general, son los jinetes quienes enseñan este tipo de comportamiento a los caballos: ellos montan y BANG empiezan a talonerarle para que el caballo avance. Rápidamente, si el caballo no quiere recibir golpes de talones o de espolones en sus flancos, él arranca desde que puede. Toma este buen hábito, una vez en silla, de flexionar tu caballo. Se trata del mismo ejercicio que pie a tierra: tira ligeramente sobre la rienda hasta que el caballo flexione el cuello, después relaja la presión. Practica varias veces a cada lado. Después de dos o tres sesiones, tu caballo sabrá que tendrá que esperarte antes de avanzar.

P&R

¿Qué hacer si mi caballo empieza a girar en círculos?
Camina con tu caballo, guarda el mismo nivel de presión hasta que se pare y se relaje. Entonces relaja la rienda y acaríciale. Después, prepárate antes de empezar: ¡quizás te hará falta caminar algunos minutos!

¿Qué hacer si mi caballo no se queda quieto cuando monto?
El procedimiento es el mismo que antes, quizás tendrás que ir a la pata coja más que caminar. Con los caballos en proceso de doma, los caballos más dominantes, o simplemente si crees no tener la condición física necesaria para seguir al caballo, te aconsejo no montarlo hasta que no esté completamente cómodo con la flexión lateral. Después, si él empieza a moverse cuando estás dispuesto a montarle, quita el pie del estribo y hazle retroceder al menos diez metros. Repite la operación cada vez que se mueva cuando intentes montarle, rápidamente va a comprender que es menos cansado esperarte que intentar evitarte.

¿Qué hacer si mi caballo empieza a moverse desde que estoy en la silla?
Aquí, la misma receta, simplemente adaptada a tu posición de silla. Asegúrate de tener las riendas en la mano cuando montes para poder flexionar el cuello del caballo, luego espera a que se pare. Si has practicado lo suficiente en el suelo, te dará su cabeza con suavidad y ligereza. Después de algunas sesiones de trabajo de este tipo, se quedará inmóvil y esperará sabiamente tus directrices.