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FRANÇAIS¿Por qué desensibilizar a tu caballo a la cuerda? La respuesta es evidente si nos dirijimos a todos los rancheros y ropers de todo tipo, aunque las otras disciplinas no deberían quedarse a un lado.
Para todos los que aman montar en exterior, puede ser interesante tener a un caballo dispuesto a estar atado a una cuerda anclada en un tronco. Para todos los demás, decís bien que cuanto más desensibilizado está tu caballo más seguro vas a estar.
Además, por lo menos, hay un punto en común indiscutible para todos los jinetes y disciplinas: hay que cinchar a tu caballo antes de montarlo.
Si domas a un caballo, desensibilizarlo a la cuerda es la primera etapa para hacerle aceptar la cincha con suavidad. Al fin y al cabo, esto te ahorrará preparar a un caballo que no se queda en su sitio mientras le cinchas o que intenta morderte en el momento que ajustas la cincha.
Seguridad
Si empiezas a un caballo joven, o corriges los problemas de otro más mayor, ponte a su lado y tenlo firmemente con tu mano izquierda. Tirando ligeramente de la cuerda, inclinarás la cabeza del caballo en tu dirección y vas a poder liberar los posteriores si es necesario.
Desarrollo
Continua lanzando la cuerda hasta que el caballo se pare y muestre un signo de relajación. Entonces relaja la cuerda y acaricia a tu caballo como forma de recompensa. Déjale respirar algunos instantes y vuelve a empezar.
Repite la operación reduciendo el tiempo de recuperación, pero siempre relajando la cuerda desde el momento en que se pare o se relaje. Y sobre todo, ¡no seas tacaño con las caricias! Rápidamente tu caballo ya no temblará mientras le lanzas la cuerda. Podrás entonces lanzar toda la longitud de la cuerda y llevarla hacia ti con suavidad.
Os aconsejo hacerlo también a lo largo del cuello, alrededor de los posteriores y de los anteriores, etc.
Esto ayudará a tu caballo a quedarse quieto en cualquier situación: si las piernas se enredan entre alambres o cuerdas, simplemente dejad las riendas sobre el cuello, etc. Una vez que esta primera etapa de desensibilización se ha acabado podrás pasar a la segunda: la preparación a la cincha. Pasa la cuerda alrededor del cuerpo de tu caballo, dejando la cuerda relativamente holgada. Continúa teniendo firmemente la cuerda con la mano izquierda, cerca de 50cm del nudo fiador ya que debes poder mantener la palanca de mando en todo momento.
De la mano derecha, coge el final de la cuerda que rodea al caballo y deslízala desde abajo hacia arriba, hasta que tu caballo muestre un signo de relajación. Luego, aprieta la cuerda con tu puño para simular el cinchado.
A cada etapa del proceso, no olvides de trabajar los dos lados. ¡Todo lo que practicas de un lado debe ser practicado del otro!
P&R
¿Qué hacer si mi caballo continúa moviéndose?
La mayor parte del tiempo, el problema es del jinete, no del caballo. Cerciórate de reconocer los signos de relajación por un lado y sé lo suficientemente firme para desensibilizar al caballo por otro lado. Sigue el caballo si éste empieza a girar en círculos, no abandones hasta que él no se haya parado o relajado. Al principio, puede tomar varios minutos.
A la atención de aquellos que doman a un caballo: ¿Qué hacer si mi caballo empieza a cocear cuando aprieto la cuerda?
Puedes empezar por desensibilizarlo bajo el vientre con la ayuda del flag. Si esto no fuera suficiente y tienes que afrontar las coces, asegúrate de tener la cuerda firmemente en tu mano izquierda para llevar su cabeza hacia el interior y así romper el movimiento. Tu caballo va a avanzar al paso o al trote alrededor tuyo: ten bien la cuerda, prepárate a trotar con él y haz lo necesario para recompensarle en el momento adecuado, ¡desde el instante en que se pare! Los signos de relajación vendrán más tarde, el primer objetivo es que se pare. Deja a tu caballo pasar la noche con eso y vuelve a empezar mañana, sé más exigente esta vez: espera a que se relaje. Muy rápido ¡tu caballo estará listo para la cincha!